GEOLOGÍA
Moraira, en la Costa Blanca, presenta un paisaje modelado por millones de años de actividad geológica. Destacan las formaciones calcáreas del Cretácico y Mioceno, especialmente visibles en el Cap d'Or. Este promontorio, con sus impresionantes acantilados y cuevas, es un ejemplo de la erosión marina y eólica. Además, el sinclinal de Benissa-Teulada y el terreno kárstico con sistemas de cuevas enriquecen el paisaje. La geología de Moraira no solo embellece el entorno, sino que también ofrece un valioso campo de estudio sobre la historia natural de la región.